SHMUEL ALEF
CAPITULO 24 AL 26
Y aconteció que cuando Shaúl volvió a perseguir a los Plishtim, que le dijeron: "He aquí que David está en el desierto de Ein Guedi".
2) Entonces Shaúl tomó tres mil hombres escogidos de todo Israel, y fue a buscar a David y sus hombres por las peñas de las cabras salvajes. 3) Y llegó a unas majadas de ovejas en el camino, y había allí una caverna adónde entró Shaúl para cubrirse los pies, y David y sus hombres estaban sentados en la parte más interna de la caverna. 4) Y los hombres de David le dijeron: "He aquí el día del cual el Eterno te dijo: "He aquí que entregaré a tu enemigo en tu camino, y harás con él lo que mejor te parezca". Entonces se levantó David, y le cortó cautelosamente a Shaúl la falda de manto. 5) Y ocurrió después que a David le dolió el corazón por haber cortado la vestidura de Shaúl. 6) Y dijo a sus hombres: "No permita D's que yo haga eso contra mi señor, el ungido del Eterno". 7) De tal modo contuvo David a sus hombres con esas palabras, y les ordenó que no se levantarán contra Shaúl . Y se levantó Shaúl de la caverna y siguió su camino.
8) David también se levantó y salió de la caverna, y llamó a Shaúl diciendo: "Mi señor el rey". Y cuando Shaúl se dio vuelta, David inclinó su rostro a tierra y se prosternó. 9) Y le dijo David a Shaúl : ¿Por qué no escuchas las palabras de los hombres que dicen que David no busca hacerte mal? 10) He aquí que en este día tus ojos han visto que el Eterno te ha entregado en mi mano en la caverna, y algunos me pidieron que te matara, pero mi ojo se compadeció de ti, y dije "No he de levantar mi mano contra mi señor, por cuanto él es el ungido del Eterno".
11) Además padre mío, mira (este trozo de) tu manto en mi mano, ya que (por el hecho de que) te corté la falda de tu manto y no te maté sabes y ves que no hay mal ni transgresión en mi mano, y no he pecado contra ti para que estés acechando mi alma para tomarla.
12) ¡Juzgue el Eterno entre tú y yo, y el Eterno me vengue de ti! Pero mi mano no será contra ti. 13) Como dice el proverbio de los antiguos, del malo sale maldad, pero mi mano no será sobre ti. 14) ¿En pos de quién sale el rey de Israel? ¿A quién persigue? ¿A un perro muerto? ¿A una pulga? 15) Sea entonces el Eterno el juez, y dé Su sentencia entre tú y yo, y defina mi causa, y me libre de tu mano".
16) Y ocurrió que cuando David terminó de decir esas palabras a Shaúl , que Shaúl dijo: "¿Es está tu voz, de mi hijo David? Y Shaúl levantó su voz y lloró. 17) Y le dijo David: "Eres más justo que yo, por cuanto tú me has hecho el bien, en tanto que yo te he recompensado con el mal. 18) Y me has demostrado hoy qué bien te has comportado conmigo, desde el momento en que cuando el Eterno me entregó en tu mano tú no me mataste. 19) Porque si un hombre encuentra a su enemigo, ¿Lo deja ir sin hacerle nada? Que el Eterno te galardone por lo que me has hecho hoy. 20) Y ahora he aquí que seguro serás rey, y el reino de Israel será establecido en tu mano. 21) Júrame entonces por el Eterno que tú no cortarás mi simiente detrás de mí y que no destruirás mi nombre de la casa de mi padre". 22) Y le juró David a Shaúl . Y Shaúl se fue a su casa, pero David y sus hombres subieron al lugar fuerte.
CAPITULO 25
Y murió Sh'muel, y todo Israel se reunió para lamentar, su muerte y lo sepultó en su casa en Ramá. Y se levantó David y bajó al desierto de Parán.
2) Y había un hombre en Maón que tenía posesiones en el Carmel, y era muy poderoso, y tenía tres mil ovejas, y mil cabras, y esquilaba sus ovejas en el Carmel. 3) Y el hombre se llamaba Naval, y su mujer se llamaba Avigail. Y la mujer era inteligente y de bella figura, pero el hombre era grosero y dado a las malas acciones, y era del linaje de Calev. 4) Y David supo en el desierto que Naval esquilaba ovejas. 5) Y envió David a diez muchachos, y David les dijo a los jóvenes: "Suban a Carmel y vean a Naval, y salúdenlo en mi nombre, 6) Y así díganle: "¡Larga vida, y paz a ti, y paz a tu casa, y paz a todo cuanto tienes! 7) He oído que tienes esquiladores. Tus pastores ya han estado con nosotros, y no le hicimos daño alguno, y nada les faltó durante el tiempo en que estuvieron en el Carmel. 8) Pregunta a tus mozos y te lo dirán. Por lo consiguiente, hallen favor los muchachos en tus ojos, porque hemos venido en un buen día. Te ruego des lo que te viene a la mano a tus siervos y a tu hijo David".
9) Y cuando llegaron los mozos de David, le hablaron a Naval conforme a aquellas palabras en nombre de David, y se detuvieron. 10) Y contesto Naval a los siervos de David, y dijo: "¿Quién es David? ¿Y quién es el hijo de Ishaí? Hay muchos siervos hoy en día que huyen de sus amos. 11) ¿Debo entonces tomar mi pan, y mi agua, y mi carne que yo he matado para mis esquiladores, y darlos a hombres de quienes no sé de dónde vienen?". 12) De tal suerte, los mozos de David se volvieron y regresaron, y vinieron y le dijeron a David aquellas palabras. 13) Y David les dijo a sus hombres: "que cada hombre ciña su espada". Y cada hombre ciño su espada, y también David ciñó su espada, y subieron detrás de David unos cuatrocientos hombres, y doscientos se ocuparon de los bagajes. 14) Pero uno de los jóvenes le dijo a Avigail, la mujer de Naval: "He aquí que David envió mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, mas él lo embistió. 15) Pero los hombres fueron muy buenos con nosotros, y no nos perjudicaron, ni nada nos faltó cuando estuvimos con ellos en los campos. 16) Eran un muro de protección para nosotros tanto de día como de noche, durante todo el tiempo en que estuvimos con ellos cuidando las ovejas. 17) Ahora considera nuestro amo, y contra toda su casa, pues él es tan hijo de Bliyáal, espíritu del mal, dios pagano que nadie, le puede hablar. Entonces Avigail se apresuró, y tomó doscientos panes, y dos botellas de vino, y cinco ovejas aderezadas, y cinco medidas de grano tostado, y cien racimos de uvas, y doscientas tortas de higo, e hizo cargar todo sobre asnos. 19) Y les dijo a los mozos: "Anden delante de mí. He aquí que yo iré detrás de ustedes". Pero ella no se lo contó a su marido Naval. 20) Y así fue que cabalgando en su asno bajó por la montaña y he aquí que David y sus hombres se encontraron con ella. 21) Y David había dicho: "Ciertamente he guardado en vano todo lo que este hombre tiene en el desierto, de manera que nada se perdió de todo lo que le pertenecía , y me devolvió mal por bien. 22) Haga así D's a los enemigos de David, y más aún, si dejo de todo lo que pertenece al alba tanto como un solo macho". 23) Y cuando Avigail vio a David, se apresuró a bajar de su asno y se inclinó ante David hasta el suelo. 24) Y ella cayó a sus pies y dijo: "Sobre mí, señor mío, sobre mí recaiga la iniquidad, y te ruego permitas a tu sierva hable a tus oídos y escuches las palabras de tu sierva. 25) Te ruego señor mío, no prestes atención a este insensato, grosero, así es él. Naval es su nombre, y la insensatez está con él, pero yo tu sierva no vi a los mozos de mi señor que tú enviaste. 26) Ahora señor mío, como que vive D's y vive tu alma, viviendo en el Eterno ha evitado que cometas derrame de sangre y que te tomes venganza por tu propia mano, que tus enemigos y los que buscan el mal a mi señor sean como Naval. 27) Y ahora este presente que tu sierva ha traído a mi señor, que sea dado a los jóvenes que siguen a mi señor. 28) Te ruego perdones la transgresión de tu sierva, por cuanto el Eterno hará ciertamente a mi señor una casa segura, porque mi señor pelea las batallas del Eterno, y la iniquidad no se hallará en ti en todos los días. 29) Y aunque algún hombre te persiga en busca de tu alma, el alma de mi señor será la vida de mi señor atada en un mismo haz de vida con el Eterno tu D's, y las almas de tus enemigos, a ellas Él las arrojará con una honda. 30) Y ocurrirá, cuando el Eterno haya hecho a mi señor conforme a todo el bien que Él ha dicho con respecto a ti, y te haya nombrado príncipe sobre Israel, 31) que esto no será obstáculo para ti, ni ofensa de corazón, ya sea que hayas derramado sangre sin causa o que mi señor se haya vengado por su propia mano. Y cuando el Eterno favorezca a mi señor, acuérdese de su sierva".
32) Y dijo David a Avigail: "Bendito sea el Eterno, el D's de Israel, que te envió este día para verme, 33) y bendita sea tu discreción, y bendita seas tú, que me has impedido venir con derramamiento de sangre y de tomarme venganza con mi propia mano. 34) Porque ciertamente -¡vive el Eterno, el D's de Israel que me ha detenido de hacerte mal a ti!- si no te hubiese apresurado a venir a mí, no le habría quedado al alba a Naval ni un macho vivo". 35) Y David recibió de la mano de ella lo que le había traído, y le dijo: "Sube en paz a tu casa; he aquí que he escuchado tu voz y he aceptado tu persona".
36) Y vino Avigail a Naval, y he aquí que celebraba una fiesta en su casa, como la fiesta de un rey, y el corazón de Naval estaba alegre dentro de él, porque estaba beodo, por lo cual ella no le contó nada, ni más ni menos, hasta que amaneció. 37) Y ocurrió a la mañana, que cuando el vino se fue de Naval, que su mujer le dijo esas cosas, y su corazón murió en él, y él se quedó como una piedra. 38) Y aconteció unos diez días después, que el Eterno hirió de muerte a Naval.
39) Y cuando David supo que Naval había muerto, dijo: "Bendito sea el Eterno, que tomo a su cargo mi venganza de la mano de Naval e impidió que su siervo hiciera el mal. La mala acción de Naval el Eterno le hizo recaer sobre su propia cabeza". Y David envió a tratar con Avigail de tomarla como mujer. 40) Y cuando los siervos de David vinieron a Avigail al Carmel, le hablaron diciéndole: "David nos ha mandado a ti para tomarte como mujer para él". 41) Y ella se levantó y se prosternó rostro a tierra y dijo: "He aquí que tu sierva está pronta para lavar los pies de los siervos de mi señor". 42) Y Avigail se apresuró, y se levantó, y montó en un asno, y fue seguida por cinco damas de su compañía, y ella siguió tras los mensajeros de David, y fue su mujer.
43) David tomó a Ajinoam de Yizreel y las dos mujeres fueron suyas. 44) Y Shaúl había dado a Micol su hija, mujer de David, a Paltí hija de Layish, que era de Galim.
CAPITULO 26
Y vinieron los Zifitas a Shaul en Guibá, diciendo: "¿No se ocultó David en la serranía de Jajilá, que está antes de Jesimón?" 2) Entonces se levantó Shaul y bajó al desierto de Zif, llevando con él a tres mil hombres escogidos de Israel en busca de David en el desierto de Zif. 3) Y acampó Shaúl en la serranía de Jaquila, que está antes de Jesimón, en el camino. Pero David moraba en el desierto, y advirtió que Shaúl venía en pos de él en el desierto. 4) Por consiguiente David mandó espías, cerciorándose así con seguridad de que se aproximaba Shaúl . 5) Entonces David se levantó y vino al lugar donde Shaúl había acampado, y David contempló el lugar donde estaban acostados Shaúl y Avner hijo de Ner, el jefe del ejército. Y Shaúl estaba dentro de la barricada de carros, y el pueblo acampaba alrededor de él.
6) Y habló David y dijo a Abimélej Eteo y Avishay hijo de Tzruyá, hermano de Ioav, diciendo: "¿Quién bajará conmigo a Shaúl al campamento?" Y dijo Avishay: "Yo bajaré contigo". 7) De manera que David y Avishay vinieron a donde estaba la gente de noche, y he aquí que Shaúl dormía en la barricada, con su lanza clavada en el suelo junto a su cabeza, Abner y la gente estaban tendidos alrededor.
8) Entonces dijo Avishay a David: "D's ha entregado a tu enemigo en tu mano en el día de hoy. Ahora, por lo tanto, te ruego me permitas que lo hiera por segunda vez". 9) Y le respondió David a Avishay: "No lo destruyas, pues ¿Quién puede poner la mano sobre el ungido del Eterno sin caer en pecado?" 10) Y agregó David: "¡Vive el Eterno que el mismo Eterno ha de herirle, o bien le vendrá su día de morir, o descenderá a la batalla y así perecerá! 11) No permita el Eterno que ponga mi mano contra el ungido del Eterno, sino que ahora te ruego tomes la lanza que está junto a su cabeza y el jarro de agua y nos vamos de aquí". 12) De tal manera David tomó la lanza y el jarro de agua que estaban junto a la cabeza de Shaúl y se los llevaron, y nadie lo vio, ni lo supo, ni se despertó, por cuanto todos estaban dormidos, porque el Eterno los había hecho sumir en profundo sueño.
13) Y David pasó al otro lado y se detuvo en la cima de la montaña, a gran distancia. 14) Y David gritó al pueblo, y a Abner hijo de Ner, diciendo: "¿No respondes Abner?" a lo que contestó Abner y dijo: 2¿quién eres tú que gritas al rey?"
15) Y David le dijo a Abner "¿No eres tú un hombre valiente? ¿Quién es como tú en Israel? ¿Por qué entonces no has guardado la debida vigilancia a tu señor rey? 16) Uno del pueblo vino para destruir al rey tu señor. No está bien lo que has hecho. ¡Vive el Eterno, que mereces morir por no haber guardado a tu señor, el ungido del Eterno! Y ahora mira dónde está la lanza del rey y el jarro de agua que estaba a su cabeza. 17) Y Shaúl reconoció la voz de David y dijo: "¿Es esta la voz, hijo mío, David?" Y le respondió David: "Mi voz es, señor mío, oh rey" 18) Y agregó: "¿Por qué mi señor persigue a su siervo? ¿Qué es lo que he hecho? ¿Qué mal es el que está en mi mano? 19) Te ruego, señor mío, escuches las palabras de tu siervo. Si ha sido el Eterno quien te puso contra mí, acepte Él una ofrenda, pero si fueron los hijos de los hombres, malditos sean ante el Eterno, porque me han expulsado el día de hoy, para que no tenga parte en la heredad del Eterno, diciendo: "Vete, sirve a otros dioses". 20) Ahora entonces no caiga sangre a la tierra fuera de la presencia del Eterno, porque el rey de Israel ha venido a buscar una simple pulga, como quien busca una perdiz en las montañas".
21) Entonces dijo Shaúl : "He pecado. Vuelve David, hijo porque no te haré más daño, pues mi vida fue preciosa en tus ojos hoy. He aquí que he procedido como un tonto y cometí un gran error". 22) Y contestó David y dijo: "Aquí está la lanza del Rey. Que unos de los mozos vengan y la recoja. 23) Y el Eterno recompensará a cada hombre por su espíritu de justicia y fidelidad, ya que el Eterno te entregó en mi mano hoy, y yo no quise poner mi mano contra el ungido del Eterno. 24) Y he aquí que tu vida fue preciosa hoy a mis ojos, por lo que sea preciosa mi vida a los ojos del Eterno y Él me libre de toda adversidad".
25) Y le dijo Shaúl a David: "Bendito seas, David, hijo mío. Serás poderoso y prevalecerás". De tal suerte David siguió su camino y Shaúl retornó a su lugar.